lunes, 29 de marzo de 2010

LAS TRES AFIRMACIONES DE LA JUSTICIA

“Hermano, por más que vuestra aflicción busquéis consolar en el mundo de las justificaciones no lograras aminorar vuestra carga sino a través de la conciencia. No encontrareis lugar en el universo que no oponga a su propio destino el orden supremo del padre; no hay lugar para las injusticias mi hermano; en vez del consuelo busca la humildad en tu corazón que te permita recibir la justicia del padre, pues en el regazo de la abnegación obtendrás la claridad de conciencia que te permitirá comprender los 3 significados de la palabra justicia; a quien acudes cuando te encuentras derrotado, estos 3 ordenes que viajan en los 3 tiempos del universo describen lo que fue, lo que es y lo que será de acuerdo al orden incuestionable del alfa y la omega.”

YO FUI.

No existe el Hijo si no a través de la conciencia del Padre manifestada en su acción creativa en el primer momento de este mundo; sin embargo antes de aquella acción incontenible fluía en su propio tiempo y espacio la conciencia del gran arquitecto, esta conciencia disponía de forma mental el orden de la materia y la energía que antes del comienzo detonarían el orden básico de las cosas, este preludio al tiempo no es más que el lapso entre el final y el nuevo comienzo, aquí donde la experiencia de todo un ciclo se contrae sobre si misma formando la personificación del padre es donde se crean las primeras y fundamentales leyes, este primer orden una vez detonada la creación se vuelve ley suprema e incontenible, nada que ocurra posteriormente es ajeno al “inicio” que surge de una primera manifestación del “ser” como unidad de las cosas, es decir todo cuanto sucede está ligado en la línea del tiempo y del espacio al origen-centro desde donde todas las cosas orbitan.
La Justicia del Pasado Supremo manifestada a través de la afirmación “yo fui” no es más que el peso superior de la voluntad primigenia del Padre sobre todo el universo, el origen común que dicta justicia acotando a todo a los principios básicos de la existencia y la conciencia, aunque la perfección del padre permite que exista la divina cualidad del “libre arbitrio” entre los seres autoconscientes es solo dentro de sus propios límites que las cosas “suceden”, esta es la justicia de lo que “existe” producto de lo que “existió” antes del comienzo, es decir, que el universo no será mas allá de lo que en el principio fue sumando a esto la experiencia de su propio colapso. Porque la ley divina es prima-imperatum el pasado o lo que fue es la justicia ajustadora que permite el trámite del principio al fin.

YO SOY.

Es entonces una vez creadas las cosas en la conciencia del Padre que estas están dispuestas para su liberación, “Yo soy” es el ciclo de acontecimientos que suceden desde el comienzo hasta el último momento en la vida de este universo, la justicia del “Yo soy” en los objetos inconscientes es la manifestación de la básica ley de la causalidad ajustada a las 4 fuerzas fundamentales, sin embargo, a pesar de existir el peso del “Yo Fui” los objetos que existen en el universo sugieren movimientos dotados de cierta libertad; en el presente las cosas en el universo de la “no auto-conciencia” son producto de una cadena de eventos que circulan en armonía de acuerdo a la primer energía que movió las cosas, sin embargo la presencia de la justicia del “yo soy” en los objetos no autónomos es irrelevante pues el vinculo de dichos objetos es mayor a la justicia del pasado. El presente y su justicia tienen verdadero peso sobre la conciencia de los seres con espíritu propio, pues solo el presente están estos destinados a “vivir”, por lo tanto es solo en este presente donde se observan los efectos de la toma de decisiones, EL “Yo Soy” viene a sobreponerse a la justicia del yo fui, pues una vez creado el universo las cosas que se “mueven” libremente son dispuestas en ordenes efímeros por los seres humanos; dentro del yo soy existe la justicia del hombre, la ley y el castigo de los tribunales, el dolor pulula esta manifestación de la justicia pues fue diseñada para ser recibida por la estructura autoconsciente del cosmos que está a su vez cubierta de una “aparente imperfección”, es así que el orden que se dicta de momento a momento organiza principalmente el “tiempo que vivimos los mortales” asignándonos de acuerdo a la “prima imperatum” las cosas que nos corresponden en armonía a nuestras propias decisiones. La mayor parte de lo que usualmente conocemos como “justicia” no es más que el desarrollo del “yo soy”, dentro de este el “libre arbitrio” o el “libre movimiento” son elementos sustanciales sobre los que recae la justicia del Hijo.

Así mismo dentro de este presente la justicia se vive en el dolor y es precisamente nuestro pavor por el que buscamos fervientemente la construcción de la sabiduría interna, es pues el dolor el verdugo energético del padre aquello que conduce a la conciencia inevitablemente hacia sí mismo, el combustible que deja de tener sentido una vez que ha conducido a la totalidad al “final-inicio”.

YO SERE.

No me cansare de repetirlo mis hermanos: “El hijo es la promesa auto-otorgada del padre”, la justicia del “Yo Seré” es la gloria suprema de la existencia y de la conciencia, a través de ella vive eterno el amor infinito del padre, pues todo está destinado a la perfección y esta es la última sentencia que la ley “prima-imperatum” dicta cuando todo “ha sucedido”.

El “yo seré” o la justicia del futuro es el espíritu santo que habita en el corazón de todo cuanto existe; la guía que se traza desde el comienzo es un largo camino de ida y regreso a través del tiempo presente, el “Yo Seré” es un momento en el tiempo, el lapso entre el último suspiro de la existencia de las cosas y el nuevo comienzo que se devela en un nuevo ciclo. Confiar en el destino de las cosas hermanos es lo único que queda cuando se comprende la justicia del “yo seré”, el padre nos ama eternamente y es en esta sentencia futura donde ha depositado toda su energía.

Hermano vos creéis que hablamos en este trazado únicamente de leyes que rigen a la totalidad de las cosas, pero estas 3 justicias están presentes vivamente en tu camino:

“Habéis creado cadenas en vuestras experiencias pasadas con las cuales hoy caminas a cuestas, sin embargo destinado estas a romper todas ellas y volar libremente de regreso a la perfección del padre”

Por el Q:.H:. Miembro Honorario Joksan Ishbak Valero Navarro

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